Consejos para manejar la sensibilidad dental a las comidas y bebidas frías
Un poco de helado. Un sorbo de una gaseosa helada. Si tenés dientes sensibles, estos alimentos y bebidas frías de todos los días pueden desencadenar una inesperada molestia.
Esto se debe a que, con el tiempo, tu capa protectora de esmalte dental puede desgastarse, exponiendo la parte interna suave de tu diente llamada dentina. Ciertos desencadenantes, como los alimentos fríos, bebidas o incluso una ráfaga de aire, pueden causar una molestia corta y aguda, también conocida como sensibilidad dental.
Aquí te acercamos algunos consejos para lidiar a diario con los desencadenantes de la sensibilidad dental al frío.
2 maneras de ayudar a manejar la sensibilidad dental al frío
1. Buena rutina de cuidado bucal
Reducí tu riesgo de sensibilidad dental al frío cepillándote dos veces al día con un cepillo dental de cerdas suaves. Una buena rutina de cuidado bucal puede ayudar a proteger tus dientes y prevenir condiciones como el desgaste del esmalte o la retracción de las encías, lo que puede conducir a dientes sensibles.
2. Cepillarse con Sensodyne dos veces al día, todos los días
Las cremas dentales Sensodyne contienen ingredientes que ayudan a aliviar la sensibilidad dental y proteger tus dientes, para que la sensibilidad dental no te impida disfrutar de tus comidas frías, bebidas y actividades favoritas. Encontrá la crema dental Sensodyne adecuada para vos.